lunes, diciembre 31, 2007

Canciones

Estoy escuchando canciones. Canciones sueltas, como suelo escuchar, como se suele escuchar.
Y me voy dando cuenta que hay música que es sólo de un tiempo. Es decir, hay música que sólo pertenece a un momento, a unos olores, sensaciones, personas, pero que después ya no muestra nada. No desencadena ninguna imagen, y me lleva a lugares que ya no son míos. Que son simplemente recuerdos. Por lo tanto, sólo me sirve para recordar situaciones, momentos y personas. Y para mí la música no es eso, no es recuerdo. Me pasa eso particularente con Serrat. Muy poco de él me gusta hoy. Puedo escucharlo recordando cómo me gustaba, pero nada más. No me vuelve a gustar.
También me pasa que voy escuchando canciones y voy tomando frases que dicen cosas que quisiera decir. En algún momento las uniré para ver que sale ... (si si si, como las frases que escucho por la calle de la gente que pasa por ahí...).

Idas y vueltas

Me encanta cuando viene, y se va para volver.

sábado, diciembre 22, 2007

Sentidos

Estoy reencontrándome con sensaciones que, por olvidadas, no sé si alguna vez fueron.
Pero están ahí, todas para mí (bueno, creo que no sólo para mí...).

Ahora

Estoy leyendo muy poco. Sólo unos cuantos blogs, que con y por curiosidad, repaso.
Tampoco me sale mucho escribir.
Como si no me quisiera distraer de sentir.

Ellos

Todos se mueven. Van, vienen.
Van a llegar a algún lugar, del cual se volverán a ir.
Ellas usan polleras ajustadas y zapatos de taco. Finitos.
Ellos camisa y corbata.
Después entran a algún edificio espejado y ya , para mí , no existen más.

lunes, diciembre 17, 2007

Nadas que son mucho

Me dice: "hay nadas y nadas"
Yo pienso: "No hay nada como nuestra nada"
Hay cuatro ventanas y las cuatro están cerradas. Ni un poco de luz entra.
¿Por qué casi nada de lo que a mi me gusta coincide con el lugar donde trabajo?

martes, diciembre 11, 2007

De la mañana a la noche

Me despierto, y lo primero que aparece es la noche anterior.

Perdida

Ahora que me pierdo, estoy más encontrada que nunca.

El día

La mañana, pesada, lenta, agobiante. La tarde, el café, la espera.
Pero está la noche, la puerta de casa, sus cigarrillos y sus abrazos.

Despierta

Me cuesta tanto volver de los lugares adonde me lleva, que no quiero ir a dormir.

lunes, diciembre 10, 2007

Pregunta

A veces me pregunto ¿Por qué es tan lindo?
Y otras, ¿por qué me pregunto por qué es tan lindo?
Y ahí ya no me pregunto más nada, sólo disfruto.

Escribir

Quiero escribir pero en mi cabeza sólo surgen obviedades.
Son muy lindas, pero obvias.
Entonces las disfruto yo y mi cabeza.

Domingo

Café oscuro (muy oscuro). Solcito, o mejor, luz por la ventana.
Música que viene de afuera, pero que no está mal.
Y ganas de más domingos.

Dice...

Silvina Garré:
"... mi religión es algo de niñez,
niñez para escapar..."

Ubicación

Digamoslo así:
Son momentos (definitivos) en los que personas de siempre, ahora son otras.
Y todo se ubica en su lugar.
Quizás nunca estuvieron.
Por eso nunca están.

miércoles, diciembre 05, 2007

Ser y hacer

Hoy recordé una frase que dice algo así como "uno es lo que hace"...
Yo espero ser lo que hago, menos lo que hago en el trabajo...

Pregunta

Me encanta cuando me pregunta si me quedé "callada de escribir".

martes, diciembre 04, 2007

Dos martes

Hoy caminé por las mismas calles que hace una semana. Pero el martes pasado el camino fue más bonito.

viernes, noviembre 30, 2007

Color

Hoy tengo mi color, aunque no haya tomado sol.

miércoles, noviembre 28, 2007

Noche de martes

Nos despedimos en la puerta, pero en realidad, nunca se fue.

martes, noviembre 27, 2007

Florida

La esquina de Tucumán y Florida no es de Buenos Aires, es de Mar del Plata.

lunes, noviembre 26, 2007

"Cosa linda"

Volví a escuchar "Cosa linda" (No te va a gustar).
Esa que dice: ... cosa linda me trajo la vida ...

Vuelta

Volví a la oficina. Pero antes, anduve en taxi por Buenos Aires.
Mirando Corrientes de mañana, me dieron ganas de caminarla a la tarde.

La luna

Cerca de Carlos Paz, quizás La Falda. La luna me seguía, o quizás yo a ella. Al rato se escondió entre las sierras. Sentí que la vida era algo parecido a eso.

Sábado y Domingo

Subí a conectarme, a pesar del café en la mesa. Y encontré justo lo que quería encontrar.

Ida II

23, pasaron 23. Y yo vi 23 hace poco. Enseguida descubrí que era 23. Décimas de segundo tardé en darme cuenta. Me gusta ganarme esos juegos: adivinar que película es en el menor tiempo posible.
Sí, sí, es con Jim Carrey, ese que me cae simpático.

Ida

00:51 marca el relojito de números rojos del micro. Números que se forman con puntitos uno al lado del otro. Y en un momento, los segundos siguen el ritmo de Divididos.

viernes, noviembre 23, 2007

Viaje II

Tengo ganas de irme, y también tengo ganas de volver.

Viaje

Me voy a la ruta.
Llevo todo lo que tengo que llevar, y no pesa.

miércoles, noviembre 21, 2007

Días

Distintos.
De siestas a la noche y a la tarde,
de las mismas calles, pero nuevas.
En los que me distraigo y me pierdo en el tiempo;
de músicas de antes y de ahora, mezcladas, juntas.
De mucha ternura, de besos, de sorpresas.
Días que quería.

lunes, noviembre 19, 2007

Viceversa

Perdí la noción del tiempo, y encontré un montón de ternura.
(aunque realmente fue al revés...)

Luz

Miro el sol por la ventana y no puedo entender cómo estoy acá*.

(*acá: una oficina)

Fe de erratas

Cuando alguien dice "hace mucho que...", quiere decir "tengo ganas de..."

lunes, noviembre 12, 2007

Pensar

Si es, si no es,
si puedo, si no puedo,
si lo sé, si no lo sé.
Sólo quiero ser y estar, dejarme llevar.

sábado, noviembre 10, 2007

Como un dolor de muelas

Como si llegaran a buen puerto mis ansias,
como si hubiera donde hacerse fuerte,
como si hubiera por fin destino para mis pasos,
como si encontrara mi verdad primera,

como traerse al hoy cada mañana,
como un suspiro profundo y quedo,
como un dolor de muelas aliviado,

como lo imposible por fin hecho,
como si alguien de veras me quisiera,
como si al fin un buen poema me saliera…
una oración.

Como si la arena cantara en el desierto
los cantos de sirena del mar Muerto,
como si para crecer sobraran las escaleras,
como si escribiera un ciego un libro abierto.

Ven a poblar el zócalo de ojos,
siembra de migas de pan caliente
mis canas de alcanfor adolescente.

Ponle al sordo voz y alas al cojo,
bendice nuestro arroz, nuestro minuto,
como si no fuéramos cómplices del luto…
del corazón.

Subcdte Marcos

viernes, noviembre 09, 2007

Cada uno escucha...

lo que quiere oir...
No sé si la canción dice eso, pero yo escucho:

"arrastrando abandono,
el amor, era olvido"

jueves, noviembre 08, 2007

Cuándo

Cuándo será la luna,
cuándo será la brisa (si, ya sé, en verano)
cuándo el azul adentro.

lunes, noviembre 05, 2007

Quién

Quién escuchará mis quejas,
quién sabrá la película que más me gusta,
quién me llamará el lunes a la mañana...
Hoy toda la soledad es mía.

martes, octubre 30, 2007

Buscados y desencontrados

Me decís que viajaste, que creías que ya no podías.
Te digo cosas que ni sé que son, pero las digo, y mientras, miro tus manos y tu color.
Volvés, sí, volvés, pero te fuiste, y volvés.
Confundís la y con la ll, y es la única vez que me gusta.
Pero, vos buscás y yo no encuentro.

jueves, octubre 25, 2007

Locos de atar

Sabina antes escribía estas cosas...



Estábamos en lo mejor
cuando sonó el despertador
como un jarro de agua fría.
El vino dulce del placer
se avinagró sobre tu piel
y la mía.
De nueve a dos, de cuatro a seis,
yo, que he nacido para rey
trabajando por dinero…
¿Y si te quitas el jersey
y nos sacamos otra ley
del sombrero?
Diles que no
piensas fichar,
pon el reloj
a la hora de los locos
de atar.
El lunes es el día peor,
bailar con un ordenador
el bolero del masoca.
Volviéndole la espalda al mar,
sin un mal beso que leevarse
a la boca.
La fuerza de la gravedad
del cielo nos exiliará
cuando subas la persiana…
¿Por qué no hacemos el amor
y tiras esa ropa por
la ventana?
Diles que no
piensas fichar,
pon el reloj
a la hora de los locos
de atar.

lunes, octubre 22, 2007

Otra vez ( ahora musical)

Yo avisé...

Rarezas


Me llama mucho la atención, y a la vez me angustia, esa distancia que existe entre los hechos colectivos y la perpeción individual que cada uno tiene de ellos. Sé, porque a mí me pasa lo mismo, que hay un gran desinterés por las elecciones, pero no puedo dejar de pensar que aquello que haga mi vecino, mi compañero de subte y de chat, va a influir en nuestras vidas. No puedo entender como no se entiende. No puedo. Entonces, vuelvo a algunas lecturas de antes:

"El primer fruto de esa imaginación -y la primera lección de la ciencia social que la encarna- es la idea de que el individuo sólo puede comprender su propia experiencia y evaluar su propio destino localizándose a sí mismo en su época; de que puede conocer sus propias posibilidades en la vida si conoce las de todos los individuos que se hallan en sus circunstancias. Es, en muchos aspectos, una lección terrible, y en otros muchos una lección magnífica. No conocemos los límites de la capacidad humana para el esfuerzo supremo o para la degradación voluntaria, para la angustia o para la alegría, para la brutalidad placentera o para la dulzura de la razón. Pero en nuestro tiempo hemos llegado a saber que los límites de la «naturaleza humana» son espantosamente dilatados. Hemos llegado a saber que todo individuo vive de una generación a otra, en una sociedad, que vive una biografía, y que la vive dentro de una sucesión histórica. Por el hecho de vivir contribuye, aunque sea en pequeñísima medida, a dar forma a esa sociedad y al curso de su historia, aun cuando él está formado por la sociedad y por su impulso histórico."


CHARLES WRIGHT MILLS: La imaginación sociológica. FCE, México

sábado, octubre 20, 2007

Resplandor eterno

Otra vez. Otra vez y habrá más.
Ahí estaban Joel y Clementine, bah Tangerine.
Otra vez recordándome el significado de dos.

viernes, octubre 19, 2007

Encuentra

El que busca ¿encuentra?

domingo, octubre 14, 2007

Papel




Tengo que sentarme a escribir y me siento Barton Fink.
Por suerte mis paredes no están empapeladas.

Todos y nadie II

El link al monólogo de la hora 25 está en español español. Horrible.
Aquí va en inglés...

sábado, octubre 13, 2007

Todos y nadie.

Hace unos días ví nuevamente el monólogo delante del espejo de un baño de disco, a Edward Norton en La hora 25 de Spike Lee.




Recién, en la ducha, creé mentalmente el mío:

¿Saben qué? ya sé que él ya no llama y "ella que ya no llama". Ya sé que él está de novio y puf, desapareció. Ya lo sé idiota. Ya sé que apareciste y ni siquiera tuviste el coraje de hablar. Ya sé para qué apareciste. Ni siquiera sabés que yo quería lo mismo que vos, cuando apareciste. Ni siquiera eso. Ya sé que me paso horas con la PC encendida, esperando que ocurra eso que no ocurre en la vida real, porque nadie escucha, porque nadie dialoga, porque todos hablan. Ya sé que a nadie le importa un coño votar, por más que nos vaya la vida en eso por delante, pero que el 80 % sigue pensando que encerrados en sus casas y comprándose unos cuantos Ipods pueden lograr la felicidad eterna, mientras afuera asaltaron a dos viejas y un indigente apareció degollado en el callejón. Ya sé que a nadie (80 %) le importan los posts de los blogs, pero todos escriben sin leer los que escriben los otros todos sin ellos, que no hombre, que no sabés que nadie sabe leer ni escribir, apestan las faltas de ortografía, las quejas constantes por la quintita propia y las fotos pedorras que ahora se llama avatares. Apestan. Saben qué Serrat y Sabina? ya sé que tienen que cobrar en euros sus cachet ( se escribrá así...) y por eso cobran 200 mangos una pedorra entrada a cesped, que les importa un pedo el Sur, Argentina y Boca, que es todo un puto negocio. Ya sé Serrat que hoy no puede ser un gran día, porque llueve, porque tengo que trabajar para pagar las putas expensas y la conexión del puto internet que me sirve para postear este pedorro post. Ya sé. Me cansaron las ausencias, me cansaron las faltas de respuesta, me cansan los pelotudos que como yo viajamos en el subte como el culo y ni siquiera nos ponemos a analizar para que mierda lo hacemos. Me cansó la tele, me cansó mi vereda, me cansan los cochecitos de bebés por la calle con madres que te lo tiran como diciéndote: Yo soy más que vos, yo tengo un hijo, dejame pasar. Te dejo pasar si se me canta el culo. Si no paso yo primero. Me cansan los idiotas que no piensan, que no escuchan, que creen que tomar cerveza y cerveza y cerveza es cool, que creen y que no piensan. Me cansan los pelotudos que bardean. Me cansan los pelotudos que se creen que son más que vos, que te ningunean porque son unos pedorros que no tienen idea de la vida. Cansada como estoy, me voy a ver una peli. Si trabaja Edward Norton o Sean Penn, mucho mejor. Quizás "me olviden" del todo y nadie.

martes, octubre 09, 2007

Crudeza

A veces, el amor se convierte en morbo y la amistad en traición.

Contradicción

A veces estoy tan preocupada por mi vida, que no puedo vivir.

lunes, octubre 08, 2007

Definción para un 9 de octubre

Hace unos años ( creo que 10) dediqué un libro con esta frase robada a Ernesto Guevara. Era un libro para alguien a quien conocía poco y quería mucho: Pablo. Quizás lo recuerde él también.
... pero si usted es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, somos compañeros, que es lo más importante...

sábado, octubre 06, 2007

Somnolencia II

Una cosa y unas gentes que no me gustan, pero de quienes no puedo despegarme.
Un libro por la mitad de Loïc Wacquant
Otro de Economía de dos chilenos (creo)
El de la Wainermann aún sin empezar
La nota de ADN de Bauman en el segundo párrafo
Las películas de esta semana y la pasada que se me escaparon
La cena en Caballito que me perdí el jueves
Las películas del Malba que no veo ni veré
Las cuadras que no caminé y toda la culpa que eché a aquél que se me cruzara por la calle.
Todo eso en mí, espera que suene el despertador.

Somnolencia

Estoy casi dormida, anestesiada. Lo lograron de a unos cuantos. Eran muchos. Todos iguales y todos distintos.
Pero hoy, me despertó:
...memoria hostil de un tiempo de paz, sin paz...
....remontar el barrilete en esta tempestad
sólo hará entender,
que ayer no es hoy, que hoy es hoy,
y que no soy actor de lo que fui.

jueves, octubre 04, 2007

Central.

Ayer, una señora con su hijo, al costado del Banco Central por Reconquista, pedía:
"Una moneda por favor..."

martes, octubre 02, 2007

La pregunta.

Uno espera. Pero, ¿qué es lo que uno espera?

martes, septiembre 11, 2007

11 de septiembre

... Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor...
¡Viva Chile, viva el pueblo, vivan los trabajadores!

jueves, septiembre 06, 2007

Parecido a la felicidad...

No me gustan las necrológicas. Me gusta recordar que hay hermosos momentos con hermosas personas. Esta muerte me toca en un particular sitio (algunos que seguramente leen esto saben muy bien por qué). Y además, me toca, porque recuerdo, allá por el 90 (creo) cuando estuvo en Argentina y yo escuchaba Guitarra Romana y Non ti scordar di me. Y son recuerdos de algo muy parecido a la felicidad.

lunes, septiembre 03, 2007

Oficinas.

No leo poesía. Pero creo que en todo puede haberla.
Salvo, en las oficinas.

sábado, agosto 25, 2007

Trelew.

El placer de leer a Tomás Eloy Martínez.


LANACION.com Opinión Sábado 25 de agosto de 2007

martes, agosto 21, 2007

Culpa.

El viernes fui al cine.
Vi "Corazones".
No me gustó.

Una de amor.

" ... a veces te extraño tanto que no puedo soportarlo..." (o algo parecido...)

Jack, protagonista de Brokeback mountain (Secreto en la montaña)

sábado, agosto 18, 2007

Final.

En diversas situaciones, dejar de creer y de querer, van de la mano.

viernes, agosto 17, 2007

Vínculos.

Ella me contó que su hermano se lo dijo. Que la cuñada se peleó con la hija de su marido. Que se dicen te amo. Que la extraña y no ve el momento de verla.
Después se fue y dos horas más tarde, debe haber llegado a su casa.
Entonces, me conecté. Estaba lleno de "muñequitos verdes". Pero estaban todos "No disponibles".

miércoles, agosto 15, 2007

Afinidad.

"Yo también soy como un náufrago,
en la furia de éste mar.
Tengo pies y tengo alas,
y me cuesta continuar..."


Silvina Garré - Para abrazarte.

sábado, agosto 04, 2007

Peor que eso...

" Me despierto de una pesadilla y descubro que la vida es aún peor..."

El protagonista de "El huevo de la serpiente"

viernes, agosto 03, 2007

Los inexistentes

Los inexistentes
Por Eduardo “Tato” Pavlovsky

Página 12 - Jueves, 02 de Agosto de 2007
Lois Wacquant, discípulo de Bourdieu, nos introduce en el ghetto de Chicago y el suburbio industrial en París. Allí nos señala que las estructuras y políticas estatales tienen un papel fundamental en las articulaciones de clase, lugar y origen de esas marginalidades. El nombre que elige este polifacético sociólogo francés es el de marginalidad avanzada. Cinturón negro y cinturón rojo son las denominaciones para ambas marginalidades (vidas desperdiciadas, los que no existen o los hombres de las cifras y estadísticas. Algunos ya no funcionan como seres humanos).
Manuel Delgado, un antropólogo catalán, en su libro Sociedades Movedizas concluye que se hace pensar, a través de la sociología científica (muy bien paga por las multinacionales de turno), que son las identidades y no por lo tanto los intereses –no las injusticias y la falta de intervención del Estado– las que producen malentendidos culturales que se resolverán a través del diálogo y reconciliación de partes.
Multiculturalismo –concepción apolítica, aeconómica, asocial e histórica de la noción “cultura”.
Surgen entonces los expertos en “resolución de conflictos” –los mediadores culturales–, los terapeutas de comunidades, que intervienen con todo tipo de fiestas de “diversidad” y jornadas interculturales. Lo económico, o el Estado, no existe como causante de esas tremendas desigualdades sociales y económicas que se pueden solucionar a base de diálogos éticos, de cómo se administra el conflicto de base y hacerlo callar en sus verdaderas causas.
De ahí, de esta filosofía, surge la retórica de los derechos humanos basados en el amor y la comprensión recíproca. Como si los derechos de los humanos tuvieran existencia autónoma y “pudieran seguir alimentándose de la pura virtud”.
La tolerancia en este caso es de por sí un concepto que presupone la descalificación de lo tolerado.
La opinión pública percibe así al racismo como una patología localizada (ej.: los skinheads), que puede ser combatida y debe serlo. De este modo los inmigrantes, vagabundos, los “sospechosos”, además de causar conflictos como minorías excretables, han “creado” la aparición de estos parásitos característicamente suyos, que son los racistas.
¿Qué dice el racista?: Toda la culpa es del inmigrante. ¿Qué dice el antirracista trivializado por los medios de comunicación o por los altavoces oficiales en la materia?: Toda la culpa es del racista.
Conclusión: suprimámoslo a uno y a otro y el orden alterado será suprimido.
Esto ejemplifica a la estigmatización como ese mecanismo que le permite a la mayoría social, o al Estado, delimitar con claridad a una minoría como causante de los males que afectan a la sociedad y que se evitarían si fuese eliminada.
Ellos dicen (la mayoría silenciosa): hay racismo, lo sabemos, pero no porque haya injusticia o explotación subhumana. Hay racismo porque hay racismo. Una adecuada formación de masas, con buena educación cultural, puede eliminar la tendencia casi congénita a excluir a ciertos prójimos y todo se acaba.
En resumen: el problema de la inmigración en Francia (o los negros de Chicago) no es poder vivir con la diferencia, sino si se puede convivir con el escándalo moral de la explotación humana indispensable para el actual modelo de desarrollo económico. Parece que podemos, si el OTRO acepta su no existencia –su no existencia de la dignidad humana– con un trabajo que lo dignifique y le permita re-construir el mundo o cultura del trabajo hoy ausentes.
Eso que dan en llamar la realidad es una construcción política y social determinada desde los centros de poder encargados de la producción y distribución de significados, para cuya eficacia resulta indispensable el concurso de mayorías sociales en cuyos temas de representación ya estaban presentes y activas las lógicas de, y para, la exclusión. La creación de un buen imaginario es indispensable (ordenado y ordenador). Siempre todo lo define el imaginario social construyendo las complicidades civiles. ¿O todavía no lo aprendimos?
Bernardo Kliksberg, economista asesor principal del PNUD para América latina, dice que 50 millones de jóvenes latinoamericanos están fuera del sistema educativo y del mercado de trabajo. “Su situación es explosiva. No tienen acceso a un primer empleo. Se generan grupos de parias en los márgenes de la sociedad. La sociedad los repudia, exigiendo su ‘disciplina’.”
Existe un 50% más de desempleo femenino –de donde surge gran parte de la prostitución, 20 millones de niños menores de 14 años son explotados laboralmente y siete millones en las más degradantes tareas como la prostitución, la pornografía y el tráfico de drogas.
América latina produce alimentos que permitirían satisfacer las necesidades del triple de su población actual. Sin embargo 53 millones carecen de alimentos suficientes.
La criminalidad juvenil crece. De 100.000 habitantes pasó de 12,5 en 1980, a 25,1 por ciento en el 2006, la principal causa es la violencia. “Una juventud desocupada y sin esperanza (y sin noción de cultura del trabajo) alejada del sistema educativo y con familias desestructuradas por la pobreza, crea vulnerabilidad. El refuerzo de mano dura frente a la población no hace más que romper sus tenues vínculos con la sociedad.”
La mano dura aumentó la población carcelaria pero no redujo las tasas de delito por no atacar sistemáticamente sus causas: trabajo, educación y familia. Esto tiene que convertirse en Política de Estado.
En Santiago del Estero el 40% de la gente no tiene cobertura médica. El sistema de salud está colapsado, saturado y en crisis. Los hospitales tucumanos son un refugio contra la pobreza. A las altas médicas les cuesta irse. ¿Adónde? Los profesionales dicen que el problema no es aumentar las camas sino resolver el problema socioeconómico de las familias: “se quedan en el hospital porque su situación es mejor que en su casa, comen y están protegidos”. En la provincia hay 300 centros médicos, 267 no tienen internación.
Me gustaría que la futura presidenta se refiera a estos temas escalofriantes y a si existe alguna solución. Nunca en el país hubo tanta diferencia entre la riqueza de unos pocos y la pobreza de muchos más. ¿Acaso exagero?

martes, julio 31, 2007

Poesía

Hacia el porvenir partieron sombras,
rumbo a mañana, algo de oscuridad.
Fue sobrevivir porque el sol de hoy
no pudo más.


No estarán completas las auroras,
quejas de mi lucirá la claridad.
Porque lo que yo tanto pretendí,
demorará...


Por más que quise bendecirme,
y más, purificarme,
yo era carne, yo era yo.
Lo que con amor hacia una mano,
lo rompía con otra el desamor.
Yo no creo que haya sido en vano,
pero pudo ser mucho mejor

Hacia el porvenir partieron sombras,
cuando no alcance sólo podré alertar...
Si alguien me oye allí,
no se olvide pues, de iluminar,
de iluminar.

Silvio Rodriguez (Hacia el porvenir)

Escritura.

Hoy leí en La Nación ( que va a hacer...) esta semblanza de Bergman.

Escenas de la vida de un genio
A los 89 años, falleció ayer el cineasta sueco que indagó como nadie en las profundidades de la condición humana

No sabremos si la muerte habrá tenido para él, como la imaginó más de una vez, el empolvado rostro de un payaso: aquel de mirada obscena y risa maliciosa que acosaba a Carl, el pobre tío inventor entre cuyos papeles encontró la inspiración para En presencia de un payaso (1997), o aquel otro, blanco y sin secretos, que conversaba mientras jugaba al ajedrez en El séptimo sello y había sido –como él mismo admitió– “el primer paso en la victoriosa lucha contra el miedo a la muerte”. La obra de Ingmar Bergman, al fin, conformó una única y dilatada película que era como un eco de su propia vida y sus propias angustias, un interminable interrogante sobre el sentido de la existencia, la muerte, el amor y la fe. Y también sobre la fascinación irresistible de la ficción, del arte como la tabla de salvación a la cual aferrarse como al espejismo que distrae y consuela y quizás hace posible elevarse cuando la muerte asedia y la única sensación que se percibe es la del hundimiento. La ficción del cine o la del teatro –por donde empezó su trayectoria impar– eran su modo de combatir el caos, de organizar el desorden. En ese afán, este gran inquisidor del alma humana puso cada vez más sus propias experiencias bajo el microscopio en una progresiva profundización de los grandes temas existenciales. Así, hizo del cine un espacio para la meditación filosófica y echó luz sobre la tragedia de la condición humana. No extraña que él solo ocupe uno de los capítulos más trascendentales de la historia del arte contemporáneo: su obra impuso al mundo una nueva forma de aproximarse al fenómeno cinematográfico. Sobre Ingmar Bergman se ha escrito todo, o casi todo. Se ha escudriñado en su biografía en busca de señales que explicaran el secreto de su genio; se lo interrogó –la mayor parte de las veces, en vano– esperando recibir, encerrados en los estrechos límites de las palabras, los sentimientos e intuiciones del mundo y de los hombres que él fue atrapando y traduciendo en imágenes durante casi toda una vida; se le destinaron los elogios más justos y los más ampulosos; sus películas, sus piezas teatrales, sus declaraciones periodísticas, sus puestas en escena, sus libros fueron desmenuzados hasta el descuartizamiento. Poco puede añadirse en estas pocas líneas de despedida. Habrá que repetir que ninguno de los grandes temas de la existencia le fue ajeno: de la vulnerabilidad del ser humano y su incapacidad para alcanzar los propios objetivos a las inestabilidades de la relación amorosa, del desasosiego y el temor ante el silencio de Dios a la soledad del individuo y la hipocresía que suele contaminar la relación con el prójimo. Y habrá que recordar datos sustanciales de su biografía: su nacimiento en Upsala, en 1918; su condición de hijo de un severo pastor luterano cuyo rígido código moral no admitía contravención alguna; su descubrimiento de las marionetas, origen de su fascinación por el teatro y en general por todo el arte de la representación; el famoso episodio doméstico de la Navidad de 1928, cuando un canje de regalos con su hermano mayor Dag le puso en las manos por primera vez un proyector de cine; sus primeras experiencias de espectador. También las primeras manifestaciones de esos demonios interiores que colmaron su infancia de pesadillas y arranques irracionales y que serían el antecedente de tantos desarreglos físicos y psíquicos padecidos en la vida adulta. De estos demonios, de aquella fascinación y de la férrea disciplina paterna, que lo llevó a la rebelión pero también marcó su modo de afrontar cada responsabilidad, se alimentó su obra, una única y extensa película que Bergman fue cincelando laboriosamente al tiempo que ganaba reconocimiento prácticamente unánime como gran artista -para muchos, el más grande- del cine contemporáneo. El alquimista Curiosa alquimia la que dio como resultado la sólida construcción bergmaniana. Los conflictos vividos en carne propia, la desesperada búsqueda de Dios, el miedo a la muerte, los duelos, los sinsabores afectivos le dieron el material para imaginar otras vidas más intensas que la real. La rigurosa disciplina que lo maltrató en la infancia le sirvió para controlar el tumulto interior y devolverlo transfigurado en emociones artísticas. Y el territorio donde pudo dar rienda suelta a su desolación, su escepticismo o su fe fue el de la fantasía, aquel mundo poético que había conocido llevado por las marionetas y que lo pondría después cara a cara con los films de Victor Sjöstrom y los dramas de August Strindberg. Entró en el cine como guionista de Alf Sjöberg y Gustav Molander antes de debutar como director con Crisis (1945). A esa primera serie de films en los que desfilan, nada casualmente, padres y profesores autoritarios, castigos, soledades y humillaciones pertenecen Prisión , La sed , Hacia la felicidad , Juventud, divino tesoro . Aquí, Un verano con Mónica fue, en 1953, su primer gran éxito. Su nombre ya empezaba a ser tan familiar como las audacias del cine sueco. (Fue en una muestra realizada en 1952 en Punta del Este donde el cineasta ganó su primer reconocimiento internacional.) Después, la crisis se tornó metafísica y se tradujo en obras admirables: El séptimo sello , La fuente de la doncella , Cuando huye el día , Detrás de un vidrio oscuro , El silencio . Otro tema fue el artista, la máscara, la mentira - Noche de circo , El rito , Persona- ; otro más, el universo femenino - Secretos de mujeres , Tres almas desnudas , Gritos y susurros- . Imposible reseñar una obra tan vasta, tan compleja y tan rica como ésta, que va de la travesura escéptica de Sonrisas de una noche de verano a la sabia reconciliación con la vida de Fanny y Alexander y al formidable ciclo sobre la vida en pareja que cerró en su obra final: Saraband . Esos títulos son la mejor prueba de la grandeza de su autor, un creador genial que hasta tuvo conciencia, autocrítica y valor para decidir el momento de su silencio. Son también testimonio de su triunfo final sobre la muerte y el olvido. Seguirán siéndolo. Por Fernando López Para LA NACION

Signo de los tiempos.

Volvió a la lectura. Hacía meses que su vista cansada no se detenía, para dejarse llevar por su placer.
En su bolso hoy conviven Marketing estratégico y el Manifiesto comunista.
Quizás en unas semanas retorne a la terapia.

viernes, julio 27, 2007

A pesar de las elecciones la sigo queriendo...

"Buenos Aires, para el alma mía
no habrá geografía mejor que el paisaje
de tus calles,
donde día a día me gasto los miedos,
las suelas y el traje...
No podría vivir con orgullo
mirando otro cielo que no fuera el tuyo...
porque aquí me duele un tango..."

martes, julio 24, 2007

Vuelos

Escucho Vuelos. De la cabeza. Y me emociona y enorgullece saber que mis sobrinos lo escuchan también...

jueves, julio 19, 2007

sábado, julio 14, 2007

Nieve.

¿Nieve? . Si, nieve.

martes, julio 10, 2007

Festejo.

Ayer, mientras disfrutaba de la nieve en la calle de mi madre, pasó un señor, mascullando un insulto, con olor a alcohol y una caja de cartón en la cabeza. Era un pobre.

sábado, julio 07, 2007

Desencuentro.

Te estoy buscando, pero no te encuentro.
Te siento tan cerca, pero no estás.
Me ilusiono que estás, pero no estás.
Me vuelvo tan simple, sólo por esperarte, que me siento una más, una persona más. Como las del subte.
Vas a estar y no vas a ser quien fuiste. Pero vas a estar.

jueves, junio 28, 2007

Contraindicación.

Tengo un trabajo nuevo.
No tengo tiempo de pensar ni de escribir aquí.
Tengo menos preocupaciones.
No tengo tiempo para volar demasiado.
Tengo un trabajo nuevo.

sábado, junio 16, 2007

Ternura e ideología.

Hace un tiempo vi, por el canal Encuentro, Raymundo. Hoy volví a ver ese documental. Entrañable. La historia de un hombre. Nada más ni nada menos.




lunes, junio 11, 2007

Diferencia y novedad.

Hoy empecé algo nuevo. Diferente.
Me siento rara.
Necesitaba sentirme rara. Diferente.
Me siento nueva.

martes, mayo 29, 2007

20 %

Me disperso en la búsqueda del 20 %. Ese, que cuando me mira, me guiña un ojo y me dice: "Te entedí".

viernes, mayo 25, 2007

Semejante.

Escuchando ayer dos canciones, noté que decían lo mismo, de distintas formas.
Una es "Nube negra", de Sabina. La otra "Venía, vengo, estoy", de la Bersuit.
El problema es que después de esa semejanza, ahora, cada canción que escucho, me resulta similar a alguna de ellas.
De todas formas es un buen ejercicio, buscar significados y significantes en cualquier resultado de una acción. Quizás observar que en realidad, siempre se dice o hace lo mismo, o parecido, pero de distintas formas...

Contestar.

A veces me pregunto por mi soledad,
y enseguida me respondo.

Bonito.

"Y a la hora del naufragio y la de la oscuridad,
alguien te rescatará,
para ir cantando."

Como la cigarra. M.E. Walsh

miércoles, mayo 16, 2007

Cine.




Últimamente he visto muy buen cine, en un ritual de miércoles (ritual que entre otras cosas se justifica por el precio de la entrada).


Entre ellas El violín, 7 años. Abosolutamente recomendables ambas.


Hoy tocaba El otro, pero no puedo ser. Tengo muchas ganas de verla realmente.


Problema.

Lo que no me gusta del verano, es el calor.
Lo que no me gusta del invierno, es el frio.

lunes, mayo 07, 2007

Caras

Siete de la tarde. Cerca del subte. Cerca de casa.
Hay caras que van y vienen. Quieren llegar. Se pisan, se tocan, hablan.
ConForman el índice de desocupación.
ConForman el PBI.
Yo los miro desde acá.
Todo puede ser mirado desde acá o desde allá.

viernes, mayo 04, 2007

Detalle.

Hoy miré cómo me lavaba las manos, y me gustó.

martes, abril 24, 2007

Cruces.

Nada de tablas de contigencia. Nada de Chi cuadrado.
Sólo nos cruzamos las miradas.
¿Recordarás aún el concepto de Curva normal?
En todo caso, un efecto puede ser atribuído a varias causas.
En todo caso, nos cruzamos, sin casualidad.

jueves, abril 19, 2007

Definición.

"... sólo ocupo algún lugar,
pongo a prueba mi confianza,
y defiendo sin dudar a los que amo..."

Silvina Garré, allá por los 90. Tréboles de cuatro hojas.

martes, abril 17, 2007

Reflexión

“Viven en una sociedad armada” Página 12
Darío Kosovsky, de la Red Argentina contra el Desarme, dice que los jóvenes de EE.UU. siguen el ejemplo del Estado: “El uso de la violencia para conseguir la libertad”.


Por Mariana Carbajal

“El ejemplo que les está dando el Estado norteamericano a los jóvenes es que las armas y el uso de la violencia son un método para conseguir la libertad”, advirtió el abogado Darío Kosovsky, integrante de la Red Argentina para el Desarme, al analizar los factores que desencadenan en Estados Unidos matanzas como la de ayer en la Universidad de Virginia. A su entender, la política armamentista de Bush es “una estimulación permanente a este tipo de fenómenos”. “En una sociedad donde hay un marco de conflictividad social y un regadero de armas, es probable que cuando se desata un conflicto se resuelva con el uso de armas de fuego”, consideró en un reportaje con Página/12. Kosovsky es coordinador del Area Seguridad del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (Inecip) y autor del libro El ciudadano sheriff. Armas y violencia en la Argentina.


–¿Por qué que ocurren matanzas de este tipo en Estados Unidos?

–Simplificarlo en un solo factor sería demasiado reduccionista. Pero no se puede dejar de enfocar el hecho de que viven en una sociedad absolutamente armada, en la que cualquier conflicto que estalla se viabiliza a través del uso de armas. ¿Por qué en Suiza, Suecia o España, que también son sociedades con una alta proporción de armas por habitante, no se producen esta clase de matanzas? Porque tienen un contexto menos conflictivo y con menos desigualdad social.

–¿Cuántas armas de fuego por habitante hay en esos países?

–Una cada tres o cuatro habitantes. Canadá también es un país sembrado de armas.

–¿Cómo es la situación en Argentina?

–Hay un arma cada diez o doce habitantes. El cálculo es que hay 2.250.000 armas: 1.200.000 registradas legalmente y 1.100.000 ilegales.

–¿Y en Estados Unidos?

–Tiene casi un arma por habitante: hay más de 200 millones de armas en la sociedad civil. La diferencia con España, Canadá, Suecia y Suiza es que Estados Unidos es un país con altos niveles de desigualdad social, aunque es un costado negado por nuestra derecha, que lo toma de ejemplo: tiene altos índices de pobreza, de encarcelamiento, de represión. No es tan libre como parece y sus habitantes viven encerrados con mucho miedo. En una sociedad donde hay un marco de conflictividad social y un regadero de armas, es probable que cuando se desata un conflicto se resuelva con el uso de armas de fuego. La derecha argentina vende aquí la imagen de que en Estados Unidos se respeta más el derecho a la propiedad privada, hablan de la política de Rudolph Giuliani y de la tolerancia cero. Pero esas políticas lo que buscan no es gestionar la conflictividad social a través de mecanismos institucionales, sino de reprimirla con teorías como la llamada “de las ventanas rotas”, en la que cualquier delito leve o cualquier “incivilidad” como tomar cerveza en la esquina o romper una ventana es controlada en el origen, porque sostiene que así se evita que derive en el futuro en un hecho delictivo. Ese tipo de políticas es estigmatizante: no busca gestionar la conflictividad social, sino anularla. Esa negación, que existe en Estados Unidos, genera que salga el tiro por la culata: la conflictividad reprimida finalmente estalla de forma más violenta, justamente porque tienen gran cantidad de armas en la sociedad civil.

–¿Por qué estas matanzas se desencadenan en ámbitos educativos, como colegios secundarios o universidades?

–Porque son los espacios donde hay mayor angustia cultural. Vivimos en una ciudadanía del miedo. Eso responde a una angustia cultural de falta de certezas sobre el futuro, de falta de identificación de lo que es la felicidad en el presente. El sistema no da oportunidades de decidir con libertad. En Argentina esta situación se manifiesta en una ciudadanía con pánico a la inseguridad. En otros países como los europeos, hay mucha menos angustia cultural, tal vez la canalizan por el lado de la fiesta. En Estados Unidos hay un uso de la violencia permanente: los jóvenes viven rodeados de una violencia que es negada, que los oprime, que ya no puede negar el genocidio a nivel internacional, que no puede negar la falta de tolerancia hacia los inmigrantes internos, la falta de cobertura social, la persecución de las minorías como los latinos. Las desigualdades se manifiestan en el ámbito de la juventud mucho más fuerte.

–¿Hay un perfil del joven que ejecuta estas matanzas?

–El prototipo del pibe es el discriminado, el que no cumple con las expectativas del sistema. Tiene dos opciones: puede someterse a ese estigma y ser el excluido o intentar cumplir con el sueño americano que siempre es un esfuerzo al que solo logran llegar muy pocos, que luego se convierten en la excepción que confirma la regla. Como Jennifer López. Entre esas dos opciones, casi no hay alternativas.

–¿Por qué disparan contra sus propios pares?

–Los chicos reproducen lo que hacen los adultos en el ámbito social. Si el valor que se reconoce en el ámbito universitario es ser el ganador, los perdedores deben enfrentar la canalización del odio hacia los pares. Cuando hablamos de sacar armas de circulación, lo que decimos es eliminar o correr a un lado un factor que hace que estos conflictos se solucionen de manera violenta. El uso de armas afecta a los más vulnerables del sistema. Lo dicen las estadísticas: la mayor cantidad de muertes está en los sectores más pobres. Hay un sujeto social, que es víctima de la violencia, que no puede convertirse en un sujeto político, que no puede construir una posibilidad de tensión, de poner en jaque a este sistema que lo oprime.

–¿Una política armamentista como la que impulsa el presidente Bush puede funcionar como permiso para el tiroteo masivo?

–Es una estimulación permanente a este tipo de fenómenos. El ejemplo que les está dando el Estado a estos jóvenes que tienen angustia cultural es que las armas y el uso de la violencia son un método para conseguir la libertad. El mensaje del gobierno es el mismo de la teoría de la seguridad nacional: “Nosotros, los ciudadanos buenos, norteamericanos que representamos los ideales de la libertad y de la igualdad, del sueño americano, tenemos que tener armas para proteger nuestra propiedad privada y para que nuestros hijos se eduquen en libertad; nosotros tenemos que enfrentar a los malos, tenemos que tener armas más grandes que las que tienen ellos, para poder eliminarlos”. Ese mensaje tan simplista en la realidad se manifiesta en un gris permanente, que hace que los que más sufren la violencia sean los sectores que nunca tuvieron libertad ni igualdad, y nunca pudieron llegar al sueño americano. El gobierno dice: hay que crear un enemigo ¿Quiénes son? Las pandillas, los negros... Los metemos presos o nosotros, los ciudadanos buenos, los matamos. Esto se reproduce en el ámbito escolar y la canalización de los conflictos siempre es por la vía reduccionista.

–En la Argentina ocurrió el caso de Carmen de Patagones. ¿Fue un hecho aislado o hay caldo de cultivo para que se repita un hecho similar?

–Antes de Carmen de Patagones estuvo el caso de Pantriste (el adolescente de 15 años que mató a un compañero de curso). No creo que la situación sea tan grave. Ciertamente, la Argentina no tiene los niveles de violencia de otros países de América latina, pero sí tiene el fracaso de instancias primarias institucionales muy cercanas a la gente de resolución de conflictos sociales. Los conflictos quedan librados a su propia dinámica y van ganando tensión. La escuela en los últimos veinte años ha dejado de dedicarse exclusivamente a educar. Hoy uno de sus objetivos es mantener a los chicos en el aula para que no esté en la calle. Para cumplir esa función el sistema educativo no está preparado. No creo que haya un caldo de cultivo, porque no hay un fenómeno de armamentismo como en Estados Unidos. Pero hay que aggiornar a la escuela para que en las aulas haya un mensaje en contra del uso de la violencia y particularmente de las armas de fuego para resolver los conflictos sociales.

De Página 12 - 17-4-07

lunes, abril 16, 2007

Sensación.


Grito. Pero nadie escucha.

domingo, abril 15, 2007

Otro documental

Se encuentra en Google y es La revolución no será transmitida. Muy bueno.

sábado, abril 14, 2007

A propósito de documentales...

El de abajo es un documental canadiense sobre las fábricas recuperadas. Está hecho en el 2003: Tristeza actual.
También hoy vi nuevamete Bowling for Columbine, que siempre es bueno volver a ver. Me impresionó que parecía una descripción actual argentina...

Documentales

miércoles, abril 11, 2007

Locos (por el fútbol)

Cuando yo puedo, vos no podés.
Cuando vos querés, yo no quiero.
¿No será hora de dejarnos llevar?
¿No será tiempo de mirarse sin decir más nada?
Sólo sé que te entiendo y me entendés.
Sólo sé que siempre estás.
¿No será hora?

lunes, abril 09, 2007

La muerte del mundo cae sobre mi vida.

Hoy el mundo cayó sobre mí ( un poeta una vez dijo algo parecido...)
Será mejor que salga a caminar.

domingo, abril 08, 2007

Sushi man

Si no te odiara tanto, no sabés como te querría...

Realidad

Sí que puede ser así.
Que los que dicen si, mañana dicen no.
Que los que deberían estar, desaparecen en el mejor momento.
Que no hay pan compartido.
Que la palabra no llega y todo es un gran error.
Que la realidad se parece tanto a sí misma.
Que nunca lo entendí.
Que la espera es demasiado larga.

viernes, abril 06, 2007

Sencillez.

Mex Urtizberea
El lector primario

Pegarle a un maestro

Lo sabe un chico de cuatro años, de salita celeste, que ni siquiera sabe hablar correctamente. Lo sabe un chico de seis años, que ni siquiera sabe escribir. Lo sabe un chico de doce años, que desconoce todas las materias que le deparará el secundario. Lo sabe un adolescente de diecisiete años, aunque sea la edad de las confusiones, la edad en la que nada se sabe con certeza. Lo saben sus padres. Lo saben sus abuelos. Lo sabe el tutor o encargado. Lo saben los que no tienen estudios completos. Lo sabe el repetidor. Lo sabe el de mala conducta. Lo sabe el que falta siempre. Lo sabe el rateado. Lo sabe el bochado. Lo sabe hasta un analfabeto. No se le pega a un maestro. No se le puede pegar a un maestro. A los maestros no se les pega. Lo sabe un chico de cuatro años, de seis, de doce, de diecisiete, lo saben los repetidores, los de mala conducta, los analfabetos, los bochados, sus padres, sus abuelos, cualquiera lo sabe, pero no lo saben algunos gobernadores. Son unos burros. No saben lo más primario. Lo que saben es matar a un maestro. Lo que saben es tirarles granadas de gas lacrimógeno. Lo que saben es golpearlos con un palo. Lo que saben es dispararles balas de goma. A los maestros. A maestros. Lo que no saben es que se puede discutir con un maestro. Lo que no saben es que se puede estar en desacuerdo con lo que el maestro dice o hace. Lo que no saben es que un maestro puede tener razón o no tenerla. Pero no se le puede pegar a un maestro. No se le pega a un maestro. A los maestros no se les pega. Y no lo saben porque son unos burros. Y si no lo saben que lo aprendan. Y si les cuesta aprenderlo que lo aprendan igual. Y si no lo quieren aprender por las buenas, que lo aprendan por las malas. Que se vuelvan a sus casas y escriban mil veces en sus cuadernos lo que todo el mundo sabe menos ellos, que lo repitan como loros hasta que se les grabe, se les fije en la cabeza, lo reciten de memoria y no se lo olviden por el resto de su vida; ellos y los que los sucedan, ellos y los demás gobernadores, los de ahora, los del año próximo y los sucesores de los sucesores, que aprendan lo que saben los chicos de cuatro años, de seis, de doce, los adolescentes de diecisiete, los rateados, los bochados, los analfabetos, los repetidores, los padres, los abuelos, los tutores o encargados, con o sin estudios completos: Que no se le pega a un maestro. No se le puede pegar a un maestro. No debo pegarle a un maestro. A los maestros no se les pega. Sepan, conozcan, interpreten, subrayen, comprendan, resalten, razonen, interioricen, incorporen, adquieran, retengan este concepto, aunque les cueste porque siempre están distraídos, presten atención y métanselo en la cabeza: los maestros son sagrados.
Por Mex Urtizberea Para LA NACION

martes, abril 03, 2007

Julio.

El fin de semana se dejó ver en un canal de cable un reportaje a Julio Cortázar, allá por los 70.
Infinito placer para el oído y el alma.
Y lo mejor, esas ganas de releerlo, siempre.

jueves, marzo 29, 2007

Barcelona.


Recorrido

Lunes: Villa Ortúzar
Martes: Villa Lugano - Palermo
Miércoles: Villa Lugano - Palermo - Once
Jueves: Vicente López - Olivos - Acassuso - Barrio Norte
¿Adónde se tramitan las aperturas de líneas de colectivo?

miércoles, marzo 28, 2007

Educación.

A veces, pienso que hay cuestiones que se dirimen en grandes generalizaciones. Por ejemplo, la idea que la educación permitiría la modificación de estructuras, objetivas y subjetivas, es algo que se plantea comúnnmente y que parece sólo una frase hecha.
En estos días tuve que asistir al nuevo exámen teórico que se debe cumplimentar para acceder al Registro de conducción. Me tocó pasar por ahí simplemente porque dejé pasar la fecha de su venciemiento, es decir, si hubiera ido en la fecha correspondiente no debería haber pasado por ahí.
Entonces me dí cuenta de todo eso que no sabía, pero que no sabía porque nadie me había enseñado.
Y pienso: aprender es esa "mezcla" entre incorporar un conocimiento teórico y una práctica que ponga en acción ese conocimiento.

Villa.

Hoy me dí cuenta que en estas últimas semanas anduve por:
Villa Urquiza
Villa Ortúzar
Villa Lugano.

Mañana de Deja Vu.

Martes a la mañana. Petinatto dice, luego de un comentario sobre GH:
"El país ya está preparado para que vuelva Men..."
Después, salí bajo la lluvia, rumbo a Villa Lugano.

martes, marzo 20, 2007

Sobre gustos ( es sobre lo único que se escribe...)

Tengo el libro Meditaciones sobre el gusto, desde hace un tiempo, y admito que por falta de tiempo y a veces de voluntad, está simplemente empezado.
Aquí un reportaje a su autor, muy interesante.
Los intelectuales y el país de hoy
"Los argentinos lo exageran todo en su afán de aparentar"

Lo dice el sociólogo Matías Bruera, que investigó la moda de la cocina gourmet

Intrigado por la identidad de los argentinos, el sociólogo Matías Bruera se dedicó a observar el paisaje nacional a través del cristal de la producción y el consumo de alimentos. Lo primero que vio fue un catálogo de contradicciones, un país que se bambolea entre los extremos: del granero del mundo a las ollas populares; de la gente que busca el pan en las bolsas de residuos a los paladares bulímicos de novedades gustativas en el circuito gourmet; de la pampa pródiga en materia de alimentos naturales al “terruño panorámicamente homogéneo de un monocultivo como la soja forrajera”. Con esa colección de opuestos, Bruera buceó en la historia y la literatura para tratar de entender quiénes somos los argentinos. “Los argentinos tienen todo el tiempo el afán de aparentar ser algo y todo lo exageran. Ahora es el mundo gourmet, como antes fueron las canchas de paddle o las mesas de pool”, dice Bruera. De sus investigaciones surgieron los libros Meditaciones sobre el gusto y La Argentina fermentada, publicados por Paidós, que serán traducidos al inglés y distribuidos internacionalmente por Peter Lang, una editorial suiza radicada en Inglaterra. Nacido en Buenos Aires en 1967, Bruera es investigador y profesor de Historia de las Ideas en las universidades de Buenos Aires y de Quilmes e integrante del grupo editor de la revista Pensamiento de los Confines . -¿Cómo surge la fascinación por el mundo gourmet? -El auge del mundo gourmet se da como un proceso de globalización. Eso habla de las formas de consumo. El consumo más distinguido va en aumento, tanto en los vinos como en los alimentos. En nuestro país, esa tendencia aparece absolutamente exacerbada, como todo lo que ocurre en la cultura argentina. Mi interés en pensar el tema de la alimentación en la Argentina es parte de la obsesión que comparto con muchos otros intelectuales y que consiste en tratar de discernir el problema de identidad que tenemos los argentinos: no sabemos qué es lo que somos. Tal vez sólo nos quedemos con la definición de Sarmiento, que dice que "argentino" es anagrama de "ignorante". Pero me parece que eso es demasiado poco, aunque funciona como un disparador provocativo para pensar nuestra identidad. -¿Cuándo advirtió que el tema de la alimentación le serviría para reflexionar sobre la identidad de los argentinos? -En la Argentina, la debacle social se produjo de un día para el otro. Fue cuando se decretó que ya no existiría la convertibilidad. En consecuencia, la mitad de la gente ya no pudo comer. Si bien no sabemos lo que somos, el mito de la Argentina como granero del mundo sigue siendo muy fuerte. De hecho, un cálculo reciente dice que la Argentina puede producir alimentos para trescientos millones de personas. Me asombré al advertir que un país que produce un exceso de alimentos no puede darle de comer a la mitad de su población. Recuerdo que un día saqué la bolsa de la basura a la calle y de inmediato vino alguien a revisarla. Algo raro estaba pasando, porque en medio de esa crisis terrible se producía la exacerbación de la tendencia hacia el refinamiento alimentario. Entonces empecé a pensar al mundo gourmet como oclusivo respecto de la cuestión del hambre. En la Argentina, el mundo gourmet se ha convertido en un programa, en una estética y en una ética frente a la desprotección, al hambre y al reparto de alimentos. Como toda idealización, el mundo gourmet es una forma de rechazo: privilegia el parecer contra el ser y lo individual frente a lo social. En un caos social como el de 2001, esa pasión exagerada por el gusto vino a ocluir el tema del hambre. La situación de afinar los paladares en un momento en que la Argentina no podía sentar a la mesa a la mitad de su población me resultaba una impudicia. -Los que afinaban el paladar mientras otros se caían del mapa tal vez estuvieran buscando el reaseguro de seguir perteneciendo -Es muy posible que tenga que ver con eso. La idealización como forma de rechazo consiste en no querer ver lo que está pasando, en no querer hacerse cargo de la situación y en comportarse como si viviéramos en el mejor país del mundo. El tema de la convertibilidad aún no ha sido estudiado en el nivel cultural. El uno a uno, con su imaginario de igualdad respecto del Primer Mundo, tuvo mucho poder y fue tan bien construido que todavía no ha sido seriamente pensado. El mundo gourmet también funcionó de esa manera. En la Argentina, todo se convierte en algo sintomático, todo es exacerbado. La cultura argentina no puede pensar en el nivel prospectivo; piensa sólo en circunstancias actuales y concretas. En el ámbito alimentario, esa actitud se ve muy claramente: la Argentina casi no se ha puesto a pensar en el aspecto productivo. -¿Quién es el responsable de la falta de atención al problema de la producción de alimentos? -En este sentido, yo le hago una crítica al progresismo, porque después de la debacle de 2001 considera que el único problema alimentario es el distributivo. Así han surgido miles de ollas populares y gente comiendo en las calles. El actual gobierno sigue esa línea: se preocupa por la distribución, que, obviamente, es importante, pero no puede pensar en lo productivo. El mundo gourmet muestra una diversificación del gusto, pero, al mismo tiempo, hay una homogeneización productiva. Cada vez se destina más cantidad de hectáreas al cultivo de soja. Está bien: los beneficios son reales. Eso llena las arcas del Estado y hace al aspecto distributivo, pero, ¿cómo sigue esta cuestión en el nivel productivo? Con independencia del mito del granero del mundo, la Argentina produce insumos con poco valor agregado, y ningún país crece sólo con eso, porque la situación actual es diferente de la que se vivía a mitad del siglo pasado, cuando se construyó la Argentina. -¿Por qué tenemos los argentinos tamaña tendencia a la exageración? -En toda la ensayística argentina y en los autores extranjeros que tienen una mirada lúcida sobre nuestro país, se advierte que la Argentina es pura forma. José Ortega y Gasset habló de eso cuando recorrió la pampa: la Argentina intenta ser, pero, como no puede ser, es falsamente. En palabras de Witold Gombrowicz, la Argentina es una masa que no llega a ser pastel. Todo el tiempo tiene el afán de aparentar ser algo, y todo es exagerado. Ahora es el mundo gourmet, pero antes fueron las canchas de paddle o las mesas de pool. Lo que no se puede negar es que los medios se subieron a ese caballo de un modo impresionante: todas las publicaciones tienen una sección de comida o de vinos, incluso las que antes eran revistas de información general. Kant advirtió la cuestión de la subjetividad del gusto y se adelantó a los gastrónomos franceses, que apostaban a una fisiología del gusto en el siglo XIX. Lo curioso es que todos estos gastrónomos que intentaban ordenar el gusto venían del mundo de la ley. Hoy, los críticos de vinos repiten el mismo esquema respecto del modo de beber. Y, además, lo hacen, pero a la manera argentina: exacerbadamente. Hablan de "maridaje", de cómo combinar un plato y un vino, describen el gusto del vino: a madera, a grosella, a tabaco, etc. En definitiva, los críticos funcionan como la publicidad: objetivan los sentidos e idealizan el producto. Pero cualquier intento de ordenar el gusto es un intento fallido, porque el gusto escapa a toda reducción y a toda ciencia. En general, el gusto de uno dice más sobre uno mismo que sobre la cosa que aprecia. Y lo que tratan de hacer los críticos es justo lo contrario: objetivar, como si el gusto tuviera que ser una determinada cosa. -¿Por qué, en la Argentina actual, quien no gusta del sushi es mirado como un analfabeto en cuestiones culinarias? -El sushi apareció como un esnobismo más, del mismo modo que ahora existe el esnobismo de los vinos de postre. El sushi ha quedado impuesto como algo más distinguido que, por ejemplo, la comida polaca. Eso tiene cierta explicación: la comida polaca está muy basada en la papa, que es un elemento barato en la Argentina, mientras que el sushi encierra la sofisticación de comer pescado crudo con un armado especial. Roland Barthes, en Mitologías , habla de la "construcción de los platos", y el sushi tiene mucho de la ambición de querer consagrar lo culinario como algo artístico. Ocurre que el mundo gourmet está absolutamente ligado al mercado y funciona con sus reglas. A mí no me incomoda tanto el auge del sushi como la denominada "cocina fusión", a la que yo llamo "cocina confusión". Eso también tiene cierta lógica para el imaginario argentino, porque lo que ofrece es una mixtura de muchos ámbitos culinarios y uno no sabe bien qué está comiendo. Hay una frase de Miguel Brascó en De criaturas triviales y antiguas guerras que yo siempre rescato: "Ni siquiera somos hijos de las circunstancias, sino de las apariencias", escribió Brascó. Eso es el mundo gourmet. -¿Cómo se resuelve en el imaginario social la contradicción entre las propuestas del mundo gourmet y el mandato de la flacura extrema? -Las clases populares se expresan en anatomías voluptuosas y circunscriptas a la cuestión del alimento como condición del ser, porque quien recoge cosas de la basura necesita sobrevivir. Las clases medias y las altas, en cambio, privilegian la forma y el parecer, es decir, consumen alimentos más digestivos y menos calóricos. En general, el deseo alimentario siempre se corresponde con un ideal estético. -Pero el ideal estético de la delgadez no anula el deseo que nos despierta el chocolate, por ejemplo -Eso es real. Hay una tendencia a comer cosas dulces y no amargas. No es casualidad que la mayoría de las empresas de comida rápida le pongan azúcar a la mayoría de los alimentos, incluidas las hamburguesas y las ensaladas. Lo hacen en función del impulso primario que nos lleva a acercarnos más a lo dulce que a lo amargo. Yo vinculo mucho el tema de la palabra con la comida porque, en materia de sabores, la lexicalización es muy elocuente. Fijate que de alguien agradable se dice que es un dulce; de alguien lindo o deseable, que es un bombón. Por el contrario, para aludir a una persona aburrida decimos que es un amargo. -¿Qué futuro le ve al movimiento slow food , la comida lenta, en su pelea contra el fast food ? -El slow food es una moda y también una cuestión reactiva: lo lento frente a lo rápido. Creo que en la sociedad actual es difícil privilegiar la espera. El orgasmo es la espera más interesante que hay y, sin embargo, esta sociedad lo quiere todo rápido. Yo pienso que el verdadero problema no reside en comer rápido o lento, sino en la decisión de quién come y quién no. Hay un dato que es crucial: en un planeta con seis mil millones de habitantes, la cantidad de sobrealimentados es igual que la de subalimentados: mil doscientos millones. -¿Los militantes del movimiento slow son sólo un grupo de románticos? -Ojalá fueran románticos. Yo creo que el movimiento slow es una tendencia del mercado. En mi opinión, nada que venga del mundo gourmet está libre de una impronta mercantil. La propuesta del slow food consiste en proveer de más posibilidades a este mundo, que mueve una cantidad de dinero infinita. Por Adriana Schettini Para LA NACION

sábado, marzo 17, 2007

Develar

Ayer a la tarde me llegó la info de Ciencias Económicas, y no llegué a tiempo para ir a la charla.
Quizás nunca es tarde para sacar velos, ¿no?

El costo de vida: denuncian que Moreno presiona a los comercios
Precios: revelan cómo el Gobierno intervino el Indec
Un funcionario del organismo confirmó que se controlaron especialmente turismo y prepagas
Un funcionario del área de precios del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) reveló ayer cómo el Gobierno intervino las oficinas encargadas de elaborar el índice de precios al consumidor (IPC), a fines de enero, para tener control sobre el resultado de las mediciones. Se trata de Luciano Belforte, coordinador de Ingresos del organismo, que dio detalles sobre el desempeño del Gobierno en el Indec, por primera vez desde que estalló la crisis y en forma pública. Belforte denunció que la directora de precios del organismo, Beatriz Paglieri, designó a una persona para controlar la evolución de los precios de las prepagas, de los alquileres y del turismo, los tres campos más delicados y cuestionados de los relevamientos de enero y febrero. También afirmó que el nombramiento de Paglieri -cercana al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno- había despertado desconfianza en el actual director del Indec, Mario Krieger, que el pasado martes fue confirmado en reemplazo del renunciante Lelio Mármora. Además, Belforte dijo que a los encuestadores del instituto les es cada vez más difícil hacer su trabajo por el temor de los comerciantes, que dicen ser visitados por inspectores que manda Moreno una vez que se retira quien hace el relevamiento. El técnico del Indec disertó ante un auditorio colmado de estudiantes en el salón de actos de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA) junto al ex director del Indec Luis Beccaria. Allí contó los entretelones de la remoción, el 29 de enero pasado, de Graciela Bevacqua del área de precios y su reemplazo por Paglieri, a quien ahora Belforte debe responder directamente. Y embistió contra Krieger, designado director del Indec en forma transitoria. "El señor Krieger, que en ese entonces era subdirector del Indec, nos dio la orden de que sacáramos todos los papeles del IPC, que fuéramos a la Sala Azul del Indec, que es como la sala de conferencias, guardando toda la información. Delante de todos los que trabajamos en el IPC, Krieger dijo que no le despertaba ninguna confianza la actual directora del área, Beatriz Paglieri, y que cualquier orden que nos diera que resultara sospechosa tendríamos que consultarla con Clyde Trabuchi [que renunció a los pocos días], que era la superior inmediata." "Este señor -prosiguió Belforte- que dijo públicamente frente a 50 o 60 trabajadores que Paglieri no era confiable, es el actual director del Indec, su jefe." El técnico sostuvo que Paglieri puso en su área tres funcionarios nuevos sin experiencia. "Paglieri me dijo que eran data entries [personas que ingresan datos] y que los tenía que entrenar, y después dio la orden de que en realidad todos tenían que rotar. Esa gente no es analista, no es encuestador y logró sacar gente de la Oficina de Ingresos para poner a estos tres. Y puso a una de estas tres personas nuevas a controlar alquileres, prepagas y turismo, vaya casualidad. Gente que no tuvo experiencia de haber controlado ese tipo de tareas antes", relató. Belforte reveló el suplicio de quienes hacen relevamientos al salir a la calle: "Los encuestadores han estado diciendo que muchos informantes les dicen: «Después de que venís vos, vienen de la Secretaría de Comercio»". El funcionario dijo que el área en la que se desempeña no recibió críticas oficiales antes de ser intervenida y que en ningún momento se habló de cambios metodológicos. Y caracterizó el accionar de sus nuevos jefes: "Por primera vez en el Indec todos los cambios son en secreto; las órdenes son verbales, nada está escrito". Finalizó con resignación: "Muchos compañeros sienten que su trabajo es al divino botón. Hay encuestadores que se sienten maltratados en la calle, porque son la cara pública del Indec. Tampoco ellos saben si lo que están haciendo es lo correcto en este momento. Existe la sospecha de que, en realidad, no se están controlando los precios: se están controlando los negocios a los que va el Indec". Por Esteban Rafele De la Redacción de LA NACION Link permanente: http://www.lanacion.com.ar/892253

martes, marzo 13, 2007

Preguntas

¿Por qué son tan lindos?
¿Por qué me gustan tanto?
Ufa.

lunes, marzo 12, 2007

Goce.

Una de las formas de diferenciarnos en esta vida es por el hecho de saber disfrutar o no.
El viernes, cena mediante, observaba una mesa con señoras de unos 50 años que festejaban vaya uno a saber que. Eso era precisamente lo de menos.
Yo mientras tanto, disfrutaba cada bocado y esperaba ansiosa el postre.

sábado, marzo 03, 2007

Otras visiones.

Te vi. Y no estaba ella con vos, ni el conmigo.
Cada vez que te veo, me hacés menos mal.
Pero igual, ojalá no te viera más...

Causa y efecto.

Es interesante observar, cuando se plantea una situación o problemática llamémosle de índole social, o por lo menos de convivencia urbana, como se atiende bien a los efectos sin considerar ni siquiera las causas. Me sobran los temas: "inseguridad", accidentes de tránsito, pobreza, y siguen miles de temas más.
Muchachos, ¿No ven la velocidad a la que circulan los colectivos en Buenos Aires? ¿No ven cómo pasan las luces en rojo? ¿No ven que casi nadie usa el cinturón de seguridad? ¿No ven las ganancias extraordinarias de las empresas? ¿No ven la distribución desigual e hiper polarizada del ingreso? ¿No ven el Superávit? ¿No ven la inflación?
Evidentemente no lo ven… ¿Nosotros, lo vemos?

Intimas

Hace tiempo que te noto que estás triste,
mujercita juguetona, pizpireta:
has cambiado, ya no eres tan coqueta
cual las flores primorosas de un altar...
¿Qué te pasa? ¿Desengaños que has sufrido?
¿Las espinas de una rosa te han herido?
¿O el amor de un ingrato que ha fingido?
¿O un vacío imposible de llenar?
Yo también vivo triste desde un día
en qué cosas de la vida me pasaron
y un surco de recuerdos me dejaron
y un dolor imposible de ocultar...
Yo te amaba y me amabas tiernamente,
mas las fuerzas del destino se opusieron
y desde entonces nuestras almas tuvieron
un vacío imposible de llenar.
¡Tus encantos, tus sonrisas tan amables!...
¡EI perfume que exhalaban tus violetas!...
!Y tus bucles y tus ojos, que princesas
anhelantes te quisieran imitar!
Mas la vida tiene abismos insondables...
Hay caminos del destino intransitables...
Hay recuerdos de amor inolvidables...
¡Y hay vacíos imposibles de llenar!

sábado, febrero 24, 2007

Es impresionante la cantidad de fichas que caen...

viernes, febrero 23, 2007

Intensidad.

Tengo ganas de comer rabas al aire libre ( de ser posible mirando al mar).
Tengo ganas de comer rabas.
Tengo ganas de ir todos los miércoles al cine.
Tengo ganas de empezar mi curso de estadística.
Tengo ganas de empezar a dar clases.
Tengo ganas de caminar y sentarme a tomar un cafecito mirando la gente pasar.
Tengo ganas de distintos lugares.
Tengo ganas de otras gentes.
Tengo ganas.

jueves, febrero 22, 2007

INDEC

Creo que esto es aún peor que el corralito. Pero como no se ve directamente no se nota.
Me da un poco de asco. Y de tristeza...

Nueva protesta por la intervención del organismo

Trabajadores del Indec vuelven a denunciar "retoques" en los índices

Temen que los nuevos desplazamientos en el área de precios incrementen la manipulación de los indicadores; hubo mensajes irónicos para Moreno; envíe su comentario

Los trabajadores del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) volvieron a denunciar presiones y “retoques” en los índices de precios, a la vez que expresaron su temor de que la intervención oficial alcance a otros indicadores, como los de pobreza e indigencia, y termine por reducir al mínimo el rol actual del organismo estadístico. Técnicos y empleados del Indec realizaron hoy una nueva protesta a horas de la difusión del dato sobre la inflación en las principales ciudades del interior del país, cifra que surge del llamado Índice de Precios al Consumidor Nacional (IPC-Nac). “El índice que se va a conocer hoy, tal como dice el cartel, es un índice retocado”, dijo en medio de la asamblea de trabajadores el delegado gremial de ATE, Daniel Fazio. Se refería a un mensaje, pintado con aerosol sobre una tela minutos antes y que fue colgado de la reja que roeda el monumento a Julio Argentino Roca. En cinco palabras, resumía el reclamo de los trabajadores: “No a los índices retoKados”. Las palabras de Fazio eran acompañdaas por un coro de voces que repetía “uno-coma-nueve; uno-coma nueve”, en una obvia alusión a lo que ellos creen fue la suba real de precios durante el mes pasado: 1,9%. Hubo varios carteles pegados en las paredes del Instituto, algunos cargados de ironía. Uno aludía a, quizás, la anécdota más célebre que envuelve al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno: “¡¡¡Socorro!!! Si Moreno es más bueno que yo ¡¡¡Estoy en problemas!!! (Lassie)”. Reunidos en la puerta del organismo, bajo la atenta mirada de una docena de policías, técnicos y encuestadores del organismo denunciaron, en diálogo con LANACION.com , presiones a los trabajadores y modificaciones en el manejo de las encuestas del área del Índice de Precios al Consumo, que a partir de enero dirige Beatriz Paglieri en reemplazo de la desplazada Graciela Bevacqua, cambio que desató la polémica en torno al Indec. Paglieri es una funcionaria cercana al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Según los trabajadores, mantuvo reuniones con los encuestadores del IPC en los últimos días. La razón oficial fue “conocer” a las personas encargadas de relevar los precios que desvelan a Moreno. Pero dos técnicos y un encuestador revelaron, no obstante, que Paglieri les pidió que a partir de ahora le entregaran a ella las planillas con los precios relevados. Esas planillas contienen la dirección de los comercios donde se toman los precios y, al menos hasta ahora, eran entregadas por los encuestadores a sus supervisores. El temor de los trabajadores es claro: que esos datos lleguen -si no lo han hecho ya- hasta el escritorio del propio Moreno. Este hecho se suma a que Paglieri desplazó a tres empleados de los siete a cargo de cargar los precios entregados por los encuestadores. "No se trata de un desplazamiento, sino una decisión de que los empleados roten en sus funciones", explicó la funcionaria a los trabajadores, según relató la delegada de prensa de ATE, Marisa Capretti. Uno de los rumores que corrió con fuerza indicaba que uno de los reemplazantes era uno de los custodios de Paglieri, que ahora también se dedicaría a cargar los precios para calcular el IPC. Los otro cuatro data-entry trabajan por contrato. No forman parte de la planta permanente del organismo y, por ende, no tienen estabilidad laboral, situación que también vive parte del personal técnico. “Hay muchas presiones y por eso la gente del IPC no baja a la asamblea y tampoco quieren hablar”, dijo una de las técnicas del organismo. Estos dos hechos arrojaron un nuevo manto de duda sobre la veracidad de los índices de precios, ya cuestionados por las modificaciones metodológicas aplicadas el mes pasado. La mira está puesta ahora en el índice de febrero: a los cambios impuestos en prepagas y turismo, los trabajadores sospechan que se sumarán alteraciones en la medición de los alimentos. Concretamente, creen que se les dará un mayor peso a los valores de los acuerdos de precios. “El falseo no se hace en el relevamiento, sino en la elaboración del índice, viendo cuál precio se toma y cuál no”, señaló un técnico del organismo. Los datos cargados en el interior del país tampoco están exentos de manipulación, ya que la base de datos con los precios está en la sede del organismo, en Capital Federal: las direcciones de Estadística provinciales cargan directamente los datos allí, a través de la red. A esto se suma que la provincia de Buenos Aires manifestó en los últimos días tener inconvenientes para calcular la inflación sobre la base de la metodología que aplicó el Gobierno en enero, algo que recordo Fazio: “La metodología ha sido cuestionada por algunas provincias, que han dicho que no pueden aplicar para el cálculo del IPC”. A la tensión en el área de precios, que según los trabajadores aún continúa, se suma el cada vez más firme temor de que todas las acciones tomadas por el gobierno nacional desde mediados de enero hasta ahora tienen, como objetivo final, la disminución del rol que juega el Indec en la economía nacional. Una técnica lo resumía de la siguiente manera: “No queremos que el organismo se convierta en un mero recopilador de datos de terceras fuentes”. Por Rafael Mathus Ruiz De la Redacción de LANACION.com
rmathus@lanacion.com.ar

Pablito (1996)

Era como una explosión de deseo, de deseo irrealizado, de deseo. La piel, como decía el , lo más irracional del mundo. Hasta tenía algo de prohibido que lo hacía más atractivo. Sin embargo no sabía como llegar a ella. Ocultaba su sentimiento como si ni siquiera el lo supiera. La evitaba, hasta la despreciaba, para esconderse de si mismo. ¡Que fuerte era el deseo para tener que ocultarlo de esa manera! Nos deberían enseñar otras cosas cuando somos chicos. Pensaba mientras intentaba dormirse en una noche de presagiable insomnio. Su mente iba por caminos desconocidos de manos y bocas que no podía controlar, como a los suyos. Se sentía mal, muy mal, daba vueltas y vueltas. Transpiraba, suspiraba. No lo podía evitar.

1996. De mi II

¿Quién se atrevería a decir que el capitalismo no fracasó? ¿Que parámetros usamos para medir sus consecuencias? ¿Que voces escuchamos en un momento como este? Lo viejo no murió y lo nuevo no acaba de nacer. Como dijo Antonio. Y es que hoy somos todos comunistas, todos deseamos las cosas que antes desearon otros y que creímos injustas, irracionales. ¿Por qué se tiende a pensar que el capitalismo no fracasa, si deja a millones de personas fuera de su propia dinámica? ¿Es acaso el fracaso una cuestión sólo política o de poder en este sentido, de opresión? Ahora sentimos nostalgia, cuando había un contrapeso, no había salvajismo, ahora que son millones los que están afuera, ahora que ganaron las ganancias, sólo las ganancias, lo demás es prescindible, es invisible a los ojos.
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Estos sistemas neoliberales nos plantean paradojas difíciles de resolver, a saber: cientos de jóvenes no tienen trabajo o lo tienen en forma precaria, esto es contratos de corta duración, magros sueldos, etc , sin embargo la oferta de créditos bancarios para el consumo es muy extensa. Pero para acceder a ellos es necesaria una antigüedad laboral, en el mismo empleo, superior a los cuatro años. ¿Cómo se explica que lo que crea el sistema para poder sobrevivir sea inservible para acceder a sus beneficios y así a su reproducción?

1996. De mi.

No. Las contradicciones del sistema no se profundizaron hasta acabar con él. Las “masas” no dijeron basta en masa y acompañaron a la vanguardia armada. No.

Babel.

No superó a Amores perros ni a 21 gramos.
Incompresión, no solidaridad, descuidos. Distintos idiomas.

miércoles, febrero 21, 2007

Espontaneidad.

Y observo todas la historias,
y cada una se complementa o se contradice.
Todas me llevan al tiempo perdido, a la misma pregunta de siempre.
Hago girar la rueda más rápido hasta que me canso.
Pero vuelvo, y me salva, otra vez me salva.

Cine

Cada vez que saco entradas en el Village Caballito, me pongo mal. Algo me hace sentir que no soy de allí. Me siento ajena, molesta, con ganas de huir.
Después, la película lo reivindica.

Precio y valor.

Recorriendo las tiendas de ropa, rememoro y reinvidico: REGALADO ES CARO...

Sur

Tiré una soga hacia atrás y me traje un disco: El sur también existe.
Es increíble sentir en los oídos el concepto mismo de clásico. Podría ser de hoy o de mañana.
Hay "cosas" que siguen siendo igual, y otras "cosas" que siguen explicando aquellas otras "cosas" como nunca. Hablando de clásicos...

Libros.

Cada vez que visito librerías tengo la misma sensación: culpa por todo lo que no leo...
Ayer y hoy recorrí algunas y siempre me sorprende la cantidad de autores y temas que dan vueltas por ahí.

lunes, febrero 19, 2007

Visiones

Te vi. Pero no me gustó verte.
Te vi cansado, débil, gris, apagado, aburrido, chato.
Te vi.

Necesidades y deseos.

A veces resulta interesante descubrir la diferencia entre los dos conceptos del título. ¿Cómo separar el deseo de tener una cámara digital y la necesidad de tenerla? ¿Cómo saber si el deseo no es una necesidad transformada en deseo, por la necesidad de algo que hasta ayer no era necesario? Siento la necesidad de sacar fotos, de sacar fotos y tenerlas de inmediato en mi pantalla, de retocarlas, de cambiarlas, de alejarlas, de enviarlas, de borrarlas, de perderlas, de encontrarlas. Es increíble como se generan necesidades de cosas que no necesitamos ¿o las necesitamos?
Bueno, si no no existiría el marketing... ( estaría bueno, ¿no?)

domingo, febrero 18, 2007

Horas se van

Dice una canción de Silvina Garré:

"Hay días que son definitivos,
y el mundo parece cambiar..."

sábado, febrero 17, 2007

Pergamino

Durante un tiempo sentí que había desconectado el placer del trabajo (sólo quedaba para las clases).
Ayer, por trabajo, viaje a Pergamino. Ayer, volví a sentir esa conexión.
Ayer, hoy, mañana.

sábado, febrero 10, 2007

Amanecer.


Los niños, se despacharon con 200 fotos del amanecer desde el río...

Parto.

Quizás todo ese dolor, significaba nacer.

Canço de matinada.

De extrañas maneras hay momentos en los que se cruzan imágenes, que se tejen entre sí hasta desembocar en una acción. Así llegué a Serrat en catalán, que acompañó parte de mi adolescencia. Hasta llegaba a transcribir las canciones en fonética...
Aquí, bellezas varias.


Memoria.

Acabo de encontrar Memoria del saqueo en Google Video. Imperdible, al igual que La hora de los hornos (aunque sólo se encuentra la primera parte).

Cha Cha Cha II

jueves, febrero 08, 2007

Tiempo perdido

Desde octubre no tomaba Stella Artois. Ayer tomé.
¡Qué tontita!

jueves, febrero 01, 2007

Cha Cha Cha

Buscando, encontré videos de Cha Cha Cha. Ya sé que lo dan en I Sat, pero esto es como una selección. Genial.
Acá una sátira sobre La naranja mecánica. (No puedo postear el video no sé por qué. He aquí sólo el link)
http://www.youtube.com/watch?v=Z9sYUmzliE8

miércoles, enero 31, 2007

Filosofía y letras

Cada día me atraen más los filósofos, por estudio o por opción. Esos son los casos de Feinmann, Sarlo, Abraham (menos porque es demasiado encriptado para mis gusto) que logran razonar, desde las premisas a la conclusión.
Hasta me seduce intelectualmente Jorge Dorio en el debate de GH... ( quizás sea porque es del 26/3 y de Nacional Buenos Aires).

Ingenuidad

¿Por qué todos protestamos por la inseguridad ( de la cual tiene que dar cuenta el Estado) y no por el hambre, la pobreza, la marginalidad, siendo que, seguramente, de esa forma se modificaría toda la realidad que nos incomoda y nos asusta?

Para una sociología de la vida cotidiana

Encontré este link, en el que se menciona a Joseph Vincent Marquez.
Aqui va lo que dice:

“Algunas formas de vida distintas de las vigentes tienen gracia, indudablemente. Para mejor y para peor, las cosas podrían ser de otra manera y la vida cotidiana de cada uno y cada una, así como la de los ‘cadaunitos’ sería bastante diferente. La persona lectora no obtendrá de este libro recetas para cambiar la vida ni –sin que vayamos a hilar demasiado fino sobre la cuestión- grandes incitaciones a cambiarla, pero sí algunas consideraciones sobre el hecho de que las cosas no son necesariamente, naturalmente, como son ahora y aquí. Saberlo le resultará útil para contestar a algunos entusiastas del orden y el desorden establecidos, que a menudo dicen que ‘es bueno y natural esto y aquello’ y poder decirles educadamente ‘veamos si es bueno o no, porque natural no es’. Consideremos un día en la vida del señor Timoneda. Don Joseph Timoneda i Martinez se ha levantado temprano, ha cogido su utilitario para ir a trabajar a la fábrica, oficina o tienda, ha vuelto a casa a comer un arroz cocinado por su señora y más tarde ha vuelto de nuevo a casa después de tener un pequeño altercado con otro conductor a consecuencia de haberse distraído pensando en si le ascienden o no de sueldo y categoría. Ya en casa, ha preguntado a los críos, bostezando, por la escuela, ha visto en telefilme sobre la delincuencia juvenil en California, se ha ido a dormir y, con ciertas expectativas de actividad sexual, ha esperado a que su mujer terminara de tender la ropa. Finalmente se ha dormido pensando que el domingo irá con toda la familia al apartamento. Lo último que recuerda es a su mujer diciéndole que habrá que hablar seriamente con el hijo mayor porque ha hecho no se sabe qué cosa. Este es el inventario banal de un día normal de un personaje normal. La vida, dicen. Pero ATENCIÓN, si el señor Timoneda es un personaje ‘normal’, ‘medio’ y éste es un día normal, es porque estamos en una sociedad capitalista de predominio masculino, urbana, en etapa que llaman de sociedad de consumo y dependiente culturalmente de unos medios de comunicación de masas subordinados al imperialismo. El personaje ‘normal’, si la sociedad fuera otra, no tendría que ser necesariamente un varón, cabeza de familia, asalariado, con una mujer que cocina y cuida de la ropa y con un televisor que pasa telefilmes norteamericanos. Hablando de José Timoneda Martinez, consideremos ahora cómo incluso su nombre está condicionado por una red de relaciones sociales. Oficialmente no se llama Joseph Timoneda i Martinez sino José Timoneda Martínez, vuelve la cabeza cuando alguien lo llama Pepe, se cabrea en silencio cuando es el jefe de personal quien le llama Timoneda sin el señor adelante y, enérgica y explícitamente, cuando es un subordinado suyo quien lo hace; insiste o no en hacerse llamar Pepe por una mujer según el aspecto que ella tenga y se siente bastante orgulloso de ser cabeza de familia, porque así los niños han de nombrarlo según su cargo doméstico de ‘papá’. Hay mucho más, sin embargo, en su nombre mismo. No diré simplemente que si hubiese nacido en África quizás se llamaría Bambayuyu, que es un nombre muy sonoro y de un exotismo justificable por la diferencia de lengua. No. Sin salirnos de nuestro ámbito, observaremos que no naturalmente habría de componerse su nombre del nombre de un santo de la iglesia católica, de un primer apellido que transmitirá a sus hijos y que le vincula al padre de su padre y un segundo que no transmitirá y que le vincula al padre de su madre. Es solamente una forma. Podría llamarse Joseph hijo de Joan Timoneda o hijo de Empar Martínez, Timoneda Joseph o tomar el nombre de su origen y resultar Timoneda de Borriaña, o haber podido elegir, al llegar a mayor, el nombre o cuál de los dos apellidos prefería llevar delante. Podría ser de otra manera, pero ésta es la que le ha correspondido, ya que vive aquí. Son costumbres. Atención, sin embargo!!! Hay quien dice que ‘son costumbres’, como si, reconocido el carácter no natural de las maneras de vivir éstas fueran resultado de un puro azar, cuando en realidad nos reenvían una y otra vez a los datos fundamentales de la sociedad. El nombre del señor Timoneda nos da pistas sobre la influencia de la Iglesia católica y sobre el hecho de que los padres ‘pintan’ más que los hijos y el padre más que la madre. Eso en el nombre solamente. Los actos cotidianos del señor Timoneda nos proporcionan muchas más pistas. El señor Timoneda podría haber pasado el día de muchas otras maneras. Nada en su biología se lo impide. Podría haber trabajado en su casa, si es que se puede hablar de casa al mismo tiempo a propósito de un espacio de 90 m2, en un sexto piso y a propósito de un edificio que fue la casa de los antepasados y sigue siendo taller. La mujer del señor Timoneda podría haber estado haciendo parte de la faena del taller y el hijo mayor también mientras aprende el oficio del padre. El más pequeño de los críos podría haber pasado el día en la calle o en casa de otros vecinos, sin noticia ni deseo de escuela alguna. O bien, el señor Timoneda podía haber pasado el día cocinando para la comuna, por ser el día que le tocaba el trabajo de la casa, mientras los demás trabajaban juntos en el campo, en la granja o en los talleres, grandes o pequeños, todos proporcionalmente a sus fuerzas y habilidades; y al atardecer reunirse todos para reírse ante una televisión más divertida o para discutir ante emisiones más informativas. (...) El día del señor Timoneda podía haber sido, pues, muy distinto y también el de las personas que le rodean. Sería un error pensar que sólo podría haber sido distinto de haber nacido en otra época. Con el nivel tecnológico actual son posibles diferentes formas de vida. Esta pequeña introducción impresionista a ‘una sociología de la vida cotidiana’ insistirá siempre sobre esa misma idea: que las cosas podrían ser –para bien y para mal- distintas. Dicho de una manera más precisa: que no podemos entender cómo trabajamos, consumimos, amamos, nos divertimos, nos frustramos, hacemos amistades, crecemos o envejecemos, si no partimos de la base de que podríamos hacer todo eso de muchas otras formas. A menudo, cuando se muere un pariente, te atropella un coche, le toca la lotería a un obrero en paro, se casa una hija o te hacen una mala jugada, la gente dice: ‘¡es la vida!’ o bien ‘¡es ley de vida!’. Lo que hacemos no es, sin embargo, la vida. Muy pocas cosas están programadas por la biología. Nos es preciso, evidentemente, comer, beber y dormir; tenemos capacidad de sentir y dar placer, necesitamos afecto y valoración por parte de los otros, podemos trabajar, pensar y acumular conocimientos. Pero cómo se concrete todo eso depende de las circunstancias sociales en las que somos educados, maleducados, hechos y deshechos. Qué y cuántas veces y a qué horas comeremos y beberemos, cómo buscaremos o rechazaremos el afecto de los otros, qué escala y de qué valores utilizaremos para calibrar amigos y enemigos, qué placeres nos permitiremos y a cuáles renunciaremos, a qué dedicaremos nuestros esfuerzos físicos y mentales, son cosas que dependen de cómo la sociedad –una sociedad que no es nunca la única posible, aunque no sean posibles todas- nos las defina, limite, estimule o proponga. La sociedad nos marca no sólo un grado concreto de satisfacción de las necesidades sino una forma de sentir esas necesidades y de canalizar nuestros deseos. Así, pensar una bomba nueva, desear una lavadora de otro modelo, comer más a menudo platos variados aunque congelados, valorar a los demás por el número de objetos que poseen y dedicar los esfuerzos afectivos a asegurar el monopolio sentimental sobre una persona no es más ‘humano’, no es más ‘la vida’, no es más ‘natural’ que pensar nuevos trucos de magia recreativa, desear más sonrisas, hacer una fiesta el día en que sí que comes pollo-pollo o valorar a una persona porque tiene más capacidad de gozar que tú y está dispuesta a enseñarte. El amor, el odio, la envidia, la timidez, la soberbia... son sentimientos humanos. Pero, ¿en qué cantidad y a propósito de qué los gastaremos? ¿Es lo mismo odiar a los judíos que a los subcontratistas de mano de obra? ¿Es igual envidiar ahora la casa con jardín y piñada de un poderoso, cuando quedan ya pocos árboles, que cuando eso sólo representaba un símbolo de poder o de prestigio? ¿Es igual amar a una persona sometida que a una persona libre? ¿Se puede ser tímido del mismo modo en un mundo donde es convenientes ser presentado para hablar con otro que en una sociedad donde todos se tutean, tratando de imponer una familiaridad que no siempre deseamos? ‘Nacer, crecer, reproducirse y morir’. De acuerdo, eso hacemos. Pero ¿acaso no importa cómo y cuándo naces, qué ganas y qué pierdes al crecer, por qué reproduces y de qué y con qué humor te mueres? El señor Timoneda se levanta cuando el satélite artificial se hace visible en el cielo de su ciudad. Antes de salir de su cápsula matrimonial mira a su compañero, dormido todavía y se coloca la escafandra individual. Hoy es un día especial; la lotería estatal sortea simultáneamente los quince que serán autorizados para procrear, los mil treinta y uno que se someterán a las pruebas de guerra bacteriológica y sesenta y dos viajes a los carnavales de Río para dos personas y una mutante. Sale a la calle ya dentro de su heteromóvil y choca enseguida con otro. Se matan los dos conductores y el viudo del señor Timoneda es obligado a seguir la costumbre de suicidarse en la pira funeraria. ¿Es natural eso?
Esa sociedad imaginaria resulta ser capitalista, postnuclear, despótica, de atmósfera precaria y homosexual neomachista. Es una sociedad posible. Podría ser anticipada proyectando y acentuando los rasgos de la sociedad capitalista actual y suponiendo que hubiese tenido lugar, tras una rebelión feminista aplastada, una eclosión de la homosexualidad reprimida acompañada de un explícito cultl al mahco. La persona lectora tiene ante sí ahora otra sociedad. ¿Es la única
posible? Tal vez diga que no, porque personalmente apuesta por el socialismo. ¿Pero qué socialismo? ¿Un socialismo donde sólo cambie la forma de gestión del capitalismo? ¿Una sociedad igual a ésta excepto en el precio más barato de los electrodomésticos? AH!!! Un poco de distancia respecto de su entorno no le vendría nada mal al lector o a la lectora.

“Lo crudo y lo cocido”

El último viernes fui a cenar afuera. Nos sirvieron en vajilla blanca, copas, y la presentación de la comida en los platos, era bien al estilo Gourmet. Y pensé que el placer de la comida buena se acrecienta cuando la presentación es acorde. Y la presentación acorde se relaciona con el diseño y la vajilla. Pero ese gusto es creado e incorporado, a través de imágenes (de todo tipo), tanto en los medios de comunicación (canales especializados), las revistas en donde se presentan comidas y los bazares donde se compra vajilla. Es por eso que me generan un placer más: no sólo me gusta la comida sino que me gusta y me gratifica la forma.

No recuerdo si en Sociología de la vida cotidiana (Joseph Vincent Marqués, al que nunca pude volver porque nunca reencontré en ninguna librería ni de aquí ni de allá) o en La construcción social de la realidad de Berger y Luckamnn, leí sorprendida la explicación básica de lo social: todos tenemos la necesidad de comer, pero cómo satisfacemos esa necesidad es lo que nos diferencia.

Es probable que todo esto haga a una “globalización” de la forma alimentaria (de aquellos que en el mundo comemos) y de así serlo sería una de las mejores o menos lacerantes, si bien modifica costumbres, gustos, tradiciones que eran propias de nuestro gusto a la hora de comer.

lunes, enero 22, 2007

Paradoja solar.

Oscurece la piel y aclara el pelo.

lunes, enero 15, 2007

Final felíz




¡Lo terminé!
Gracias Maestro

jueves, enero 11, 2007

Novedad.

Hoy conocí el Malba. Es extraño, pero siento que si lo hubiera conocido hace unos años no me hubiera gustado. Todo cambia.

miércoles, enero 10, 2007

Hace no sé que tiempo ya

Para el futuro colega, que no se la acordaba...

Hace no sé qué tiempo ya
que no le digo a alguien te quiero.
Qué extraño es todo
por donde he estado.
Qué días más lejos del amor.
Hace no sé qué tiempo ya
que estoy sentado maldiciendo,
sumando noches, restando sueños,
maldito por mi maldición.
Nunca he servido para lo que
me ha tocado, desde que no sé
qué causa te alejó.
Puede que fuera causa mía,
pero quién recuerda causas
cuando el tiempo es más dolor.
Mis labios se han endurecido
para decir palabras bellas.
Qué duro es todo lo que yo digo.
Qué suave todo lo que sueño.
Hace no sé qué tiempo ya...

(1969) Silvio Rodriguez

Deseos 2

Cómo los lugares por los que no quiero pasar más, ya los tengo en mi cabeza, ahora tengo ganas de hace esa lista, la que no iba a hacer.
Quiero mucho de todo esto:
Un helado de chocolate blanco y menta granizada
El aire en la cara por Colón, con un saquito
Las calles de Granada a la noche
Punta del diablo y Balizas
La pileta de Vicente López ( puede ser de otro lugar)
Santiago, Francisco y Felicitas (en orden de aparición)
El sol en el balcón de Alberdi
Las cenas por Caballito
Ganas de hacer cosas todo el tiempo
Dormir y mirar películas una tras otra
La comida y el vino
Recordar para poder seguir...